La forma
La forma está entre lo perspectivo y la representación. Un objeto puede tener apariencias muy diversas o ser percibido desde puntos de vista diferentes.
La forma estructural es la capacidad de identificar al objeto de la representación o de la percepción.
Existe tres maneras básicas de representar la forma:
- Proyección: implica la adopción de un punto de vista fijo. Toda proyección es una abstracción visual y los criterios que deben seguirse para conseguir la mejor representación del objeto son:
- Ser esencial, es decir, recoger el esqueleto estructural del objeto.
- Ser generativa, es decir, que permita completar aquellos elementos que la forma no recoge.
- Escorzo: es una representación de un objeto o personaje en sentido perpendicular u oblicuo con relación al plano del cuadro que contiene la imagen por medio de la perspectiva de tal manera que resulte más estrecho y de color menos intenso cuanto más se distancie del espectador. Da sensación de profundidad y tridimensional.
- Traslapo: es la superposición de los objetos en la imagen y supone la representación incompleta de la forma. Para que dos objetos superpuestos pueden ser percibidos adecuadamente han de cumplirse dos requisitos:
- Deben ser percibidos como independientes.
- Deben estar situados en distintos términos del espacio de la representación.
Las funciones plásticas del traslapo son:
- Jerarquización.
- Crear itinerancias de lectura dentro de la composición y dar orden interno a las imágenes.
- Crear cohesión, agrupación, unidad.
- Favorecer lo tridimensional.
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